Un día de celebración nacional se convirtió en tragedia este lunes cuando un hombre armado mató a seis personas e hirió a decenas de otras en un desfile del 4 de julio en Highland Park, Illinois, cerca de Chicago, dejando a la nación en duelo por otro tiroteo masivo.
El presunto atacante, identificado por las autoridades como Robert E. Crimo III, utilizó un "rifle de alta potencia" en un ataque que pareció ser "aleatorio" e "intencionado", dijo la policía. Creen que el hombre, que fue detenido más tarde este mismo lunes, se subió a la azotea de un negocio y abrió fuego contra el desfile unos 20 minutos después de que éste comenzara.
Los transeúntes pensaron inicialmente que el sonido de los disparos que atravesó el soleado desfile justo después de las 10 de la mañana en la Avenida Central de la ciudad, a unos 40 kilómetros al norte de Chicago, eran fuegos artificiales, hasta que cientos de asistentes comenzaron a huir aterrorizados, abandonando cochecitos, sillas y parafernalia con la bandera estadounidense esparcidos por las calles.
Lee más aquí.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario